ELLA

Imagen de cubierta: ELLA
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Editorial: 
Coleccion del libro: 
Idioma: 
Castellano
Número de páginas: 
336
Dimensiones: 210 mm × 150 mm × 0 mm
Fecha de publicación: 
2014
ISBN: 
978-84-938363-2-0

Publicado en 1936 en Chile, Ella recoge los primeros compases de la ni?a Mercedes Pinto Armas de la Rosa y Cl?s, nacida el 12 de octubre de 1883. Despierta e inteligente (ojal? hubiera sido var?n, dicen los amigos), hu?rfana de padre, a quien no recuerda pero que es su viva imagen, vive en el nido de una familia acomodada y culta, con su madre, su abuela (la gran matriarca), sus t?as y su hermana peque?a. Con una personalidad arrolladora desde el principio, mete a su familia en compromisos cuando mezcla sirvientes con se?ores, cuando suspira de amor por un poeta a los seis a?os, cuando prefiere los ojos tristes y llanos de Jos? Mart? antes que vituperarlo por haber hecho perder a Espa?a su ?ltima colonia de ultramar, cuando pide, en el rosario vespertino, una oraci?n por Mateo Morrals, el anarquista que atent? contra Alfonso xiii, cuando plantea cuestiones inc?modas sobre la escalera de poder de la iglesia cat?lica. El genio con el que naci? Mercedes Pinto pudo desarrollarse libremente, porque ella le dio alas. S?lo los castigos, las penas y las ausencias conseguir?n doblegar un poco el esp?ritu apabullante de esta ni?a.
En Ella se habla de amor, de infancias felices, de azoteas plagadas de jazmines, de criadas que acompa?an a las se?oritas, de la junta de caridad de las se?oras cat?licas que obligan a besar crucifijos a los moribundos, de lecturas, de las primeras obras de teatro que Pinto escribi? y represent? en el sal?n de su casa, de las correr?as con su hermana, de viajes en barco, de aventuras imaginarias del capit?n Grant, de pr?ncipes que matan dragones, de puestas de largo. Pinto se analiza a s? misma, se reconoce en la ni?a que fue, cuando su vida parec?a perfectamente delineada. Habla de sus novios, de cartas secretas, del consolador silencio de las iglesias, de las murmuraciones insanas de la alta sociedad, de las tentadoras luces del teatro, de la rigidez de una abuela que sabe que sobre ella pende el juicio que los dem?s hagan de las que tiene a su cargo, de los rituales de balc?n de los noviazgos, de su hermana que se casa y se va, de su desesperaci?n...
En Ella se habla de conocer a un hombre oscuro que le inquieta, y que por tristes carambolas resulta su marido, el abogado y paranoico Juan de Foronda (nombre que nunca se utiliza en la novela, es s?lo ?l), con quien convive durante diez a?os, del que tiene tres hijos, con el que viaja a Madrid para internarlo en un manicomio, del que huye porque quiere acabar con ella y quedarse con los ni?os.
En Ella se habla de alguien con todas las de perder (?Yo soy mujer y adem?s no soy rica; dos grandes inconvenientes para que se pueda obtener justicia en la vida?), que busca en el laber?ntico centro de Madrid de los a?os 20 un lugar en el que esconderse, donde sus hijos est?n protegidos de las amenazas de su marido y ac?litos, se habla de abogados que comprenden su situaci?n y que poco m?s que comprensi?n pueden darle, de un pasante de abogado que la mira como si la quisiera y que tiempo despu?s (esto ya no aparece en Ella, es historia) ser? su segundo marido, el que la acompa?ar? en su exilio americano.
En Ella, en suma, se habla de una mujer que super? obst?culos, que mir? a los m?s d?biles (las mujeres, los campesinos, los obreros, los analfabetos) y quiso compartir con ellos su fortaleza. Que encontr? piedras en el camino y las deshizo con su oratoria. Que fue pedagoga, poeta, dramaturga, locutora de radio, creadora de grupos de teatro, oradora, periodista. Que ten?a un sentido del humor exquisito. Que vivi? 93 a?os y que los primeros veinte, los que se recogen en Ella, son el caldo de cultivo para la eclosi?n que tuvo lugar despu?s, lejos de su tierra natal, a la que s?lo regres? en contadas ocasiones.