MARINUS VAN DER LUBBE Y EL INCENDIO DEL REICHSTAG

Imagen de cubierta: MARINUS VAN DER LUBBE Y EL INCENDIO DEL REICHSTAG
Precio: 4,00€
Agotado
Editorial: 
Coleccion del libro: 
Idioma: 
Castellano
Número de páginas: 
93
Dimensiones: 220 mm × 140 mm × 0 mm
Fecha de publicación: 
2009
ISBN: 
978-84-933205-4-6
Traductor/a: 
GARCÍA VELASCO, CARLOS

... declaro que mis actos están fundados por motivaciones políticas. He leído en los Países Bajos que los nacionalsocialistas están ahora en el gobierno de Alemania. Siempre he seguido la política alemana con mucho Interés y he leído lo que los periódicos escribían sobre Brüning, Papen y Schlelcher. Cuando Hitler llegó al poder, pensé que levantaría el entusiasmo en Alemania, pero que también provocaría graves tensiones. He comprado todos los periódicos que publican noticias sobre el tema. [...] Yo mismo soy de izquierdas y hasta 1929 fui miembro del Partido Comunista Holandés. Lo que no me ha gustado de ese partido es que quiere jugar un papel dirigente y que rechaza dejar la dirección a los trabajadores mismos. Soy solidario con el proletariado que practica la lucha de clases, Sus dirigentes deben estar en primera línea. Las masas deben decidir por sí mismas lo que deben o no hacer [...] "Opinaba que era absolutamente necesario hacer algo para protestar contra este sistema. Como los trabajadores, claramente, no quieren hacer nada, he querido hacer algo por mi mismo, He pensado que provocar un incendio en alguna parte era un medio válido. No he querido atentar contra individuos, sino contra algo que pertenezca al sistema. Los edificios públicos estaban todos, pues, en el punto de mira como, por ejemplo, la Oficina de Ayuda Social, porque es un edificio donde se encuentran los trabajadores. Luego, el ayuntamiento, porque es un elemento del sistema, y después el palacio imperial. Este último porque está situado en el centro y si se hubiese quemado, habría provocado grandes llamaradas visibles desde lejos. Como esos tres incendios no se produjeron y mi gesto de protesta no servía de nada, elegí el Reichstag porque es un punto central del sistema". "A la cuestión de saber sí he actuado solo, declaro que ese es el caso. Nadie me ha ayudado en mi acción y tampoco he encontrado a nadie en el edificio del Reichstag".
(Marinus van der Lubbe)