BRAVO, JOSÉ

Jose Bravo nació en el 80, en Castellón. No tomó teta. Cuando tuvo que elegir, decidió estudiar Comunicación Audiovisual y, como segunda opción, Psicología. Pero al día siguiente cambió el orden. Se licenció pero hizo de todo menos de psicólogo. A los 26 años se compró su primera cámara digital y empezó a hacer fotos. No ha parado. Mientras, conoció un enfoque diferente de terapia: la gestalt. Y se enamoró de la psicoterapia. A Jose le gusta capturar lo natural, lo espontáneo, sea en la calle o en un espacio íntimo; mirar a la gente y sus emociones. Todo esto lo practica desde sus dos vocaciones, que ya se han convertido en profesión. De hecho, no solo practica la fotografía y la psicoterapia, sino que también se ha atrevido a combinarlas. A José le gusta dejarse llevar. En 2011, cuando estaba en paro, decidió «tirarse» a la calle a hacer las fotos de un evento dirigido a niños (Ruzafa loves Kids) intuyendo que ahí pasaría algo. Y ahí se cruzó con Noelia, que a los pocos meses buscaba una fotógrafa para un libro de lactancia. Jose no conocía el mundo de la lactancia, ni es padre. Pero accedió y se lanzó a hacer fotos de madres y de bebés que viven y sienten todo tipo de emociones mientras dan teta.