Presentación

«Desde mediados de los años 70 ha ido creciendo la producción cientifica en geografia que adopta un enfoque feminista. Estimulado inicialmente como expresión académica del movimiento en favor de la igualdad de las mujeres [...]Dos enfoques caracterizaron los primeros trabajos feministas en geografía: la crítica de la geografía que daba por supuesto que la experiencia masculina equivalía a la experiencia humana en general, y la descripción empírica de la geografía de las mujeres para demostrar cuán distinta era de la de los hombres. [...]Empezaron a encontrarse relaciones entre el género y otras causas de desigualdad, como la clase y la raza, y a admitirse la necesidad de tomar en consideración la diversidad de experiencias de las mujeres en vez de presentar a las mujeres como una categoría homogénea. Muchas investigaciones siguen ocupándose de la desigualdad, pero otros estudios se centran en el examen de los espacios y lugares que las mujeres crean para ellas y en sus visiones del mundo.[...]  La geografia feminista examina como los sistemas políticos y economicos y los valores culturales configuran los roles de los géneros y sus relaciones de modo que determinan o restringen sus elecciones espaciales. La geografia feminista reconoce la importan cia de dos esferas de la vida, la esfera de la producción economica, a veces descrita como la esfera de la acción pública, y la esfera de la reproducción de la sociedad concebida en ocasiones como la esfera privada o doméstica para estudiar las formas en que ambas esferas se interrelacionan. Su preocupación por la esfera doméstica distingue a la geografia feminista frente a otros enfoques geogrificos que confinan su atención al ámbito publico. Por Último, debido a insuficiencias de los materiales y los métodos del pasado, la geografia feminista busca fuentes de información y métodos de analisis que revelen las experiencias de las mujeres y su visión del mundo». Así comienza uno de los ya textos clásicos de la geografía feminista que escribieron Janice Monk y Dolors García Ramón en 1987.

Desde entonces, mucho ha cambiado en el reconocimiento de estos saberes y disciplinas. Tanto, que en los últimos años algunas de las mayores intervenciones urbanísticas se han apoyado en el diseño con enfoque de género para justificar su desarrollo. Tal es el caso, por ejemplo de la Operación Chamartín en Madrid. El principal desarrollo aprobado en los últimos años  en la ciudad, que incide en un modelo depredador, basado en el beneficio económico y que profundiza en la segregación y polarización social y espacial ya existente, pero que se justifica con el apoyo de la Cátedra Unesco de Género y Política de Igualdad en Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM)a través la aplicación de la perspectiva de género es su desarrollo. Lo que llamaríamos un ejemplo de pink o purplewashing.

Al tiempo que los intensos debates de los movimientos feministas sobre el territorio, en especial en américa latina, han producido un rico diálogo entre feminismos descoloniales y feminismos comunitarios sobre territorio, extractivismo y violencia de género, así como una experiencia de cartografía social, que ha enriquecido profundamente el campo de la geografía feminista.

En este curso intentaremos dar cuenta de la importancia de estos aportes así como reconocer y problematizar sobre aquellas cuestiones en que las geografías feministas pueden estar acompañando procesos que inciden en prácticas desiguales, gentrificación o en ocasiones reaccionarias.

Metodología

El curso se compone de siete sesiones. Las dos primeras sesiones funcionan a modo de introducción tanto del campo general de la geografía feminista como las aportaciones que desde los debates feministas sobre el terriotorio se han introducido en los últimos años. La tercera sesión será un paseo por la memoria de las burjas, que busca aterrizar las cuestiones tratadas en las sesiones anteriores. El bloque central está compuesto por tres sesiones que abordan tres aspectos parciales de las discusiones abiertas en el campo de la geografía feminista, centrñandose, en esta ocasión en la cosntrucción del espacio público, del espacio comunitario y el espacio doméstico. Finalmente cerraremos el curso con una sesión de debate sobre los retos del urbanismo feminista.

Todas las sesiones se pueden seguir de forma online. El formato de cada sesión está indicado en su descripción. No se requieren de conocimientos previos.