Han pasado los años y arden ya los obradores de la OuLiPo y los colegios de la Patafísica. Del surrealismo del Locus Solus hemos pasado al superrealismo de Snow Crash. Hemos recibido un mundo tan deformado que no hay parodia ya que lo supere ni lo explique. El momento del Patarrealismo Salvaje ha llegado. Óliver Punk es realismo mágico, literatura gonzo, el último lingotazo de los sátrapas trascendentes. Imaginación violenta y desatada, humor veloz y tecnología punta al servicio de la buena literatura. Implantes de antenas cerebrales, brazos mecánicos, máquinas de poemar, clonaciones, mayordomos virtuales, traductores de sinapsis y rinocerontes asesinados. Todo es posible en el excéntrico e hilarante universo de este libro, incluso un viaje alucinado a bordo de un ciberbuga destartalado.
